Atención! Trucos para hacer que tu bebé por fin coma...

No te estreses esto sucede de manera muy común, ya que los niños de etapa lactante y maternal ven los alimentos como un complemento de la leche, por lo que si ellos perciben un sabor extraño”  a la misma es posible que lo rechacen.

En los primeros 6 meses de vida solo bastará con probaditas a la papilla ya que la leche materna o fórmula láctea les aportará la mayoría de los nutrientes necesarios, no por ello daremos por hecho que si nuestro bebé no se termina la papilla estará bien, pero esta situación es más controlable que la de los niños que tienen más de un año de edad, porque para ellos no es relevante comer y están teniendo un desgaste calórico grande comparado a la que consume de alimentos, mayor aun cuando comienzan a caminar.

Es importante resaltar que si los niños entre 1 y 3 años de edad se siente parcialmente satisfechos eso les bastará, porque cuando vuelvan a tener hambre seguramente les vamos a brindar alguna golosina entre comidas, por lo que si nosotros queremos que nuestros hijos tengan buenos hábitos alimenticios, deberemos ser firmes y no ceder ante chantajes.

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 Nuestro hijo ¡No solo come por la boca!

Todos sus sentidos han de estar motivados para que el hecho de comer se convierta en un placer. Los alimentos bien preparados y presentados en el plato le pueden ayudar a potenciar su apetito, porque también come por los ojos. Incluso el color de los alimentos puede hacérselo mucho más atractivo, su olor, sonidos al crujir, pero principalmente las texturas (déjalo tomar la comida con las manos).

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Trucos para que tu bebé tenga una buena alimentación

1.    Crea un ambiente agradable. Evita que la comida esté condicionada al castigo, si no concluye el plato.

2.    Respeta 3 o 4 horas entre comidas. Dependiendo la edad y su organismo su estomago tardará ese tiempo en vaciarse y hacer la digestión.

3.    Cambia su percepción de la cantidad de comida. Sirve a tu hijo la cantidad de comida que necesita en función de su edad en el plato más grande. De este modo, percibirá que hay poca cantidad de comida dentro de su plato.

4.    Cambia el aspecto físico del alimento. Si lo que tu hijo no come son alimentos fritos, déselos hervidos o al revés. Si lo que no quiere es comida fría, prueba a calentársela un poco. Si la rechaza porque no le gusta el dulce, désela con un poco de sal y al revés. Su sentido del gusto no tiene por qué coincidir con el tuyo.

5.    Fomenta su autonomía. Puede motivarle poner la mesa, dejar que él mismo se sirva y que decida y tenga autonomía sobre sus gustos alimenticios, principalmente que coma solo.

6.    Enséñale a comer en familia. Para que se apropie de los hábitos alimenticios de los adultos, asimilando la conducta y los modelos de la familia.

7.    Fomenta la alimentación equilibrada. Permitirle escoger su menú puede influir en el éxito o en el fracaso de su alimentación. El éxito significa que el niño debe probar una variada cantidad de alimentos saludables para ir acostumbrando su paladar a distintos sabores.

8.    Evita complacencias y exquisiteces. La hora de la comida tiene un lugar, un tiempo y un fin claro y necesario.

9.    Que toque la comida con los dedos. El sistema de conocer su entorno en el niño se fundamenta en los dedos, no lo castigues es parte de su proceso.

10. Ofrécele sólo lo que necesita. No pretendas que el niño coma la misma cantidad de alimento que los adultos. 

11. 
Haz de la comida lo más importante. Si permites que durante la comida tenga a su disposición juegos alternativos, estos se convertirán en lo más importante y dejara de lado la comida.

12.  No le dejes picar entre horas. Una de las razones más importantes por las que un niño no tiene hambre es porque pica entre horas y no llega hambriento a las comidas.

13.  Adiós a la TV, computadora, libro o juguetes. Es necesario que el bebé comprenda que se sienta a la mesa a comer y no a hacer otra actividad.

14.  Solo la leche necesaria. El bebé de acuerdo a su etapa de desarrollo irá requiriendo menor cantidad de leche, si nosotros no realizamos esos cambios, la leche le permitirá estar satisfecho y perderá el apetito a otro tipo de alimentos.

15.  No sustituir alimentos sólidos por suplementos alimenticios. Dejar atrás el temor de una desnutrición de nuestro bebé combatiéndole con este tipo de productos, lo que estamos fomentando es que no vuelvan a querer comer otra cosa.

16.  Negocia con él durante la comida. Puedes conseguir que se coma las verduras si le alternas una cucharada con otra de su plato favorito. La fruta alternada suele dar resultado. Nunca se debe negociar a cambio de dulces y caramelos. 

Platillos llamativos y equilibrados

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